Sandra Oh recibe un doctorado honoris causa por la Universidad de Dartmouth

Redacción: Cosas / Foto: Instagram - Sandra Oh.

Sandra Oh, inolvidable por su papel como Cristina Yang en Grey’s Anatomy, volvió a demostrar por qué sigue siendo una de las actrices más queridas de la televisión. El pasado 14 de junio, la intérprete de origen coreano-canadiense fue reconocida con un doctorado honoris causa por la prestigiosa universidad Dartmouth College, en New Hampshire, Estados Unidos.

Sandra, quien nunca asistió a la universidad en la vida real, bromeó durante su emotivo discurso:
“Al fin cumplo el sueño de mis padres de tener un título universitario. Nunca fui a la universidad, solo interpreté personajes que sí lo hicieron”, provocando risas y aplausos entre los graduados.

Sin embargo, el momento más viral de la jornada llegó cuando, fiel a su esencia y con un toque de nostalgia, se puso a bailar al estilo Grey’s Anatomy, recordando las emblemáticas escenas que compartía con Ellen Pompeo (Meredith Grey) al ritmo de la música en los pasillos del hospital más famoso de la televisión.

Durante su intervención, Sandra compartió una reflexión profunda sobre su etapa en Grey’s Anatomy. Aunque la serie le brindó estabilidad, fama y privilegios, también confesó que fue uno de los periodos más difíciles de su vida.
“Cuanto más quería que cambiaran mis circunstancias externas, peor me sentía”, reveló. Fue solo cuando empezó a mirar hacia adentro que todo comenzó a encajar.

“Nada me ha enseñado más que la incomodidad. Te ayuda a desarrollar la fortaleza que necesitas para enfrentar la vida”, expresó ante los asistentes, dejando un mensaje de autenticidad, vulnerabilidad y valentía.

Desde su cuenta de Instagram, Sandra compartió una imagen del evento con la frase:
“¡Una doctora de verdad! (Bueno, honoraria). Gracias Dartmouth College por dejarme bailar con los graduados y por el privilegio de dar el discurso de este año”.

Una vez más, Sandra Oh nos recuerda que la vida se trata de abrazar lo inesperado y que incluso las estrellas más grandes también atraviesan luchas internas… y bailan cuando más lo necesitan.

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