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Por: maría José Troya C
Fotos: Rosa Isla (Quito) / Joshua Degel (Guayaquil)
Entre el juego y las risas, está la enseñanza. En la rectitud, en la calma y en el abrazo profundo, está la incondicionalidad. Las lecciones de vida, siempre oportunas, están cargados de paciencia y claridad.
Estos padres –de diferentes edades- comparten sus momentos más sensibles junto a sus hijos y nos cuentan cómo ha cambiado su vida des-de que tienen a alguien que sigue sus pasos.En esta edición, homenajeamos a la paternidad presente, a la que lleva consigo la responsabilidad de guiar con integridad a los hijos sin que falten nunca las demostraciones de amor.
¡Feliz Día del Padre!
Jaime Andrés Roggiero y Chiara
44 años y 5 años
“En la sencillez de estos pequeños momentos está la verdadera felicidad”
¿Qué es lo que más disfrutas de ser papá?
Me llena de alegría ver la evolución de mi hija, su día a día; disfruto ver cómo va cambiando, cómo ha aprendido tantas cosas que le hemos ido enseñando. También yo aprendo de ella y aprendo a apreciar la belleza y la magia de cada momento en la vida.
Si tu hija pudiera recordar un solo valor que le transmitiste, ¿cuál quisieras que fuera?
La integridad. Que sea siempre honesta con ella misma y con los demás, incluso cuando es difícil. Quiero que sepa que los errores se cometen, pero la forma que los enfrentamos define quienes somos; cada errores una lección que nos acerca a la mejor versión de nosotros mismos.
¿Qué ha sido lo más desafiante y lo más gratificante de ser padre?
Lo más desafiante es verla en momentos de tristeza y guiarla para sobrellevar la tensión, confusión y/o frustración. Es desafiante poner pausa a un mundo que va de prisa, y poner atención a todos los pequeños detalles e identificar que es lo que siente, lo que le molesta, lo que le causa dudas, para poder guiarla con amor, paciencia y dedicación a superar esos momentos.
Lo más gratificante es todo lo demás. Verla reír, ver cómo descubre el mundo, cómo confía plenamente en mi. Cuando corre a abrazarme al llegar, o me cuenta sus historias con esa emoción tan pura, cuando me pide que la acompañe más tiempo antes de dormir. Siento que no hay nada más valioso. Ser su papá me ha cambiado. Me ha hecho más sensible, más fuerte, y me ha enseñado a amar de una manera que no conocía. Lo más hermoso es sentir que estoy ayudando a formar a una persona maravillosa y saber que en sus ojitos soy su mundo. Ser padre no es fácil, pero ella lo vale cada segundo.
¿Cómo ha cambiado tu vida desde que eres papá?
Mis decisiones dejaron de ser egoístas.Intento que cada decisión que tomo sea filtrada pensando en su bienestar, antes que nada.
¿Cuál ha sido la lección más grande que has aprendido en esta etapa?
La importancia de la paciencia y la presencia. Ella me ha enseñado a valorar cada momento, a escuchar con el corazón y entender que lo más importante no son las respuestas, sino el amor y el tiempo que le dedicamos. Ser papá me ha recordado que en la sencillez de estos pequeños momentos estála verdadera felicidad.
¿Cómo te gustaría que te recuerde como padre?
Como un padre amoroso y presente, que siempre estuvo allí para ella, apoyándola en sus sueños y enseñándole con paciencia y cariño. Quiero que valore los momentos simples, como leerle un cuento, jugar juntos o simplemente escucharla. Lo más importante es que ella sepa que siempre puede contar conmigo y que la amo mucho, sin importar qué pase.
¿Hay algo de tu crianza con tu padre que quieres transmitir a tu hija/o algo que prefieres evitar?
Algo que valoro profundamente de mi crianza con mi padre es que siempre fue un padre presente, sin importar lo ocupado que pueda estar, siempre encontró la manera de estar ahí. Me inculcó el amor por la familia, la importancia de mantenernos unidos y el saber que, pase lo que pase, siempre hay un lugar seguro en el que puedes apoyarte. Eso es lo que quiero transmitirle a Chiara: que el amor y la unión familiar son un refugio, y que siempre voy a estar ahí para ella, como mi padre estuvo para mí.
Jaime González Robalino con Emilia y Felipe
33 años, 3 años y 10 meses.
“Todo tiene un sentido más profundo ahora”
¿Qué es lo que más disfrutas de ser papá?
Llegar a mi casa, después de un día bien pesado con mil cosas en la cabeza, y que te reciban con una sonrisa de oreja a oreja, y un abrazo enorme.Todos los problemas desaparecen.
Si tus hijos pudieran recordar un solo valor que les transmitiste, ¿cuál te gustaría que fuera?
El amor a Dios en lo ordinario y saber amar a todas las personas que nos rodean.
¿Qué ha sido lo más desafiante y lo más gratificante de ser padre?
Lo más desafiante ha sido aprender a educar con firmeza y dulzura, con mucha libertad sin caer en extremos. Y lo más gratificante ha sido aprender a ver la vida como niños; con mucho amor y siempre alegres.
¿Cómo ha cambiado tu vida desde que eres papá?
Me ha enseñado a vivir con más intención. Todo tiene un sentido más profundo ahora.
¿Cuál ha sido la lección más grande que has aprendido en esta etapa?
Que amar es servir, incluso en los pequeños detalles del día a día.
¿Cómo te gustaría que te recuerden como padre?
Como alguien que estuvo presente en todos los momentos importantes de sus vidas, que los amó tal como son y que siempre creyó en ellos.
¿Hay algo de tu crianza con tu padre que quieres transmitir a tu hijo o algo que prefieres evitar?
La importancia de realmente estar en lo que haces. Y estar significa de verdad estar al 100%, no coger el celular ni estar con otras cosas en la cabeza. Los niños se dan cuenta cuando verdaderamente estamos con ellos o cuándo solo nuestro cuerpo está, pero la cabeza la tenemos a mil kilómetros de ahí.
Patrick Sonne con Antonella, Patrick, Amelie y Chiara.
44 años, 19, 17, 12 y 12 años
“Lo importante es estar, más que saber...”
¿Qué es lo que más disfrutas de ser papá?
Su compañía, verlos crecer, descubrir el mundo a su manera, sentirme amado por ellos, sorprenderme con su lógica y su ternura. Ser papá me ha enseñado que lo esencial está en lo más simple, que el amor hacia un hijo no tiene límites, y que es una lucha constante por aprender día a día a ser mejor persona y mejor padre.
Si tus hijos pudieran recordar un solo valor que les transmitiste, ¿cuál te gustaría que fuera?
Me encantaría que recuerden siempre el valor de la bondad; que se interesen por hacer el bien a los demás, por transmitir amor en todo lo que hagan en su vida y que traten siempre con respeto y humildad a las personas.
¿Qué ha sido lo más desafiante y lo más gratificante de ser padre?
Lo más desafiante ha sido encontrar equilibrio entre ser guía y no imponer, entre proteger y dejar que aprendan. Pero lo más gratificante es ver cómo me buscan y confían en mí, el que sepan que pueden contar conmigo siempre, y que estaré ahí para apoyarlos y guiarlos.
¿Cómo ha cambiado tu vida desde que eres papá?Ser papá es lo más importante que me ha pasado, sin duda alguna. Todo cambió:mi escala de valores, mi tiempo, mi visión del futuro.Hoy todo tiene un propósito más profundo que antes.
¿Cuál ha sido la lección más grande que has aprendido en esta etapa?
He aprendido a soltar el control, a entender que no todo tiene que estar perfecto, que equivocarse también enseña. Mis hijos me enseñan que lo importante es estar, más que saber.
¿Cómo te gustaría que te recuerden como padre?
Como alguien que siempre estuvo a su lado, preocupado por ellos, inculcándoles valores y enseñándoles a ser mejores personas. Alguien que les hizo sentir amados y que buscó lo mejor para ellos en todo momento, a pesar de no ser perfecto.
¿Hay algo de tu crianza con tu padre que quieres trasmitir a tu hijo o algo que prefieres evitar?
De mi padre rescato muchas cosas im-portantes, como el esfuerzo incansable por criarme de la mejor manera posible con su buen ejemplo, su amor incondicional y su constante disposición a ayudarme siempre que ha sido necesario. Quiero que mis hijos reciban lo mismo: impulsar en gran medida la parte afectiva y cariñosa, que esta no se pierda nunca, que los abrazos, los besos y las palabras dulces perduren entre nosotros.
Patricio Solines y Patricio Nicolás
36 años y 3 años
“Las acciones son las mayores demostraciones de amor..."
¿Qué es lo que más disfrutas de ser papá?
Realmente disfruto todo, pero si tuviera que elegir una cosa sería la satisfacción que uno siente al ser un ejemplo y una guía para una persona que apenas está empezando a vivir.
Si tu hijo pudiera recordar un solo valor que le transmitiste, ¿cuál te gustaría que fuera?
La honestidad. En realidad hay muchos valores que quisiera que formen a Patricio como persona, pero considero que la honestidad es un valor que se ha ido perdiendo en nuestra sociedad y que es un pilar fundamental del ser humano.
¿Qué ha sido lo más desafiante y lo más gratificante de ser padre?
Ha habido muchos desafíos, quizás uno delos más importantes ha sido el lograr balancear mi tiempo entre el trabajo y mi familia. Me gusta estar presente en todo lo que tenga que ver con él y evidentemente a veces no se puede. Sin embargo, creo que he logrado tener un buen equilibrio entre mi vida personal y profesional, sin descuidar ninguna de las dos.
¿Cómo ha cambiado tu vida desde que eres papá?
Ha sido un cambio total, pero un cambio para bien. Las prioridades que alguna vez tuve se reorganizaron el momento en que nació Patricio. Podría parecer como que se disminuye el tiempo personal, pero es mi mayor satisfacción saber que todo el esfuerzo diario lo haces por tu hijo y su bienestar.
¿Cuál ha sido la lección más grande que has aprendido en esta etapa?
El ser papá me ha enseñado a pensar en las necesidades de los demás antes que en las mías. Consecuentemente he desarrollado mayor paciencia, empatía y generosidad; lo cual me ha ayudado incluso en el ámbito profesional.
¿Cómo te gustaría que te recuerde como padre?
Como una persona amable, cariñosa, leal, feliz y amante del fútbol. Un amigo al que pueda siempre acudir cuando tenga algún problema, cuando quiera solo reírse o lo que sea que necesite. Alguien perseverante que no se da por vencido...
¿Hay algo de tu crianza con tu padre que quieres trasmitir a tu hijo o algo que prefieres evitar?
De mi padre he aprendido muchos valores como la honestidad, el trabajo duro y la perseverancia. Sin embargo, lo que más valoro de mi padre es esa dedicación que tenía conmigo, como cuando se despertaba a las 5 de la mañana los fines de semana después de una semana dura de trabajo, para prepararme el desayuno y que alcance a comer antes de participar en los torneos de squash. Me llevaba y me esperaba hasta el final. Me aconsejaba y era mi fanático número uno. El mejor legado que le puedo dejar a Patricio son esas acciones y momentos de apoyo incondicional que mi padre me dio a mi. Las acciones son las mayores demostraciones de amor que un padre puede dar a su hijo.
